03 marzo, 2005

El tráfico de menores avanza silenciosamente

La información de cómo se trafica con menores en Cochabamba está dispersa en la Policía, el DNI, la Defensoría y la Brigada de Protección. Los padres entregan a sus hijos para que sean llevados casi siempre al exterior, incluso llegaron a venderlos.

Rocío Cabezas

El ofrecimiento de un buen trabajo con altos salarios puede ser la puerta para que muchos niños terminen en centros de prostitución, o en otros casos utilizados para el tráfico de drogas, de órganos, en adopciones ilícitas o trabajos forzados. Aunque en Cochabamba no se sabe con exactitud la magnitud de este fenómeno, las autoridades consideran que éste avanza silenciosamente.
El fenómeno difícilmente puede ser observado a simple vista, pero a través de diferentes mecanismos de información se conoce que avanza constantemente y que el país no cuenta con instrumentos legales suficientemente sólidos para hacerle frente, indicó la directora de la Defensoría Municipal de la Niñez y Adolescencia, Marcia Ustáriz.
Ustáriz explicó que tampoco existe un registro único de todo los casos ocurridos en los últimos años, porque toda la información se encuentra dispersa en la Policía Técnica Judicial, la Brigada de Protección a la Familia, Defensa del Niño y Niña Internacional, como también la Defensoría de la Niñez.
La directora de la Defensoría del Niño y Niña Internacional (DNI), Evelin Agreda, aseguró que existe un vacío legal en el tema y ese aspecto ocasiona que las estadísticas, sobre el tráfico y la tenencia ilícita de niños, se divaguen.
“Existen algunos casos en proceso legal, donde los menores fueron llevados a Argentina. Inicialmente se denunció uno; sin embargo, suponemos que diez menores viajaron junto a esta adolescente”, explicó Ustáriz.
La mayoría de los adolescentes llevados al exterior -explica Ustáriz- no guardan documentos, siendo los apoderados (o traficantes) los que se encargan de tener el pasaporte, carnet de identidad o certificado de nacimiento, para dejarlos en indefensión y mantenerlos en cautiverio. A veces hasta sin recibir ningún tipo de remuneración económica y trabajando únicamente por el tiempo de comida.

Un fenómeno invisible

El fenómeno del tráfico de menores es casi invisible y para enfrentarlo, precisó Ustáriz, se requiere mayor control en fronteras y que el sistema legal del país incluya sanciones drásticas en contra de las personas, grupos o redes que trafiquen con los niños y niñas.
También se estaría hablando de controles policiales, migratorios, administrativos en las fronteras, entre otros. “Puede ser que exista una red de tráfico de menores, estamos tras la pista de estas personas”, afirmó.
El DNI

La directora del DNI, Evelin Agreda, destacó que un punto importante para luchar contra el tráfico de niños es la prevención como una obligación de toda la sociedad. Se puede prevenir el tráfico de niños -señaló Agreda- informando a la población sobre lo que es el tráfico de niños y cuáles son las formas que utilizan estas redes.
Bolivia, visto desde el exterior, es uno de los países más vulnerables para la actividad del tráfico de niños, niñas y adolescentes.
“Es un país donde se puede fácilmente obtener certificados de nacimiento y carnets de identidad, que son requisitos para sacar a un niño del país”, señaló Agreda.

Venta de niños

El año 2003, la Defensoría Municipal de la Niñez y Adolescencia atendió tres casos de venta de niños, uno de ellos tenía de por medio un documento privado.
La ex directora de esta institución, Ruth Trigo, señaló en esa oportunidad que esta situación sucede principalmente por la mala situación económica que atraviesan muchas familias y especialmente por la falta de madurez para enfrentar la maternidad.
En algunos casos las mujeres que deciden vender a sus hijos lo hacen por iniciativa propia y, en otros, inducidos por familiares o allegados.
En otros casos existen parejas que no tienen hijos y para evitar todo el trámite de adopción lo que hacen es ofrecer dinero a alguna pareja, para que ésta les ceda a su niño o niña.
El año 2004, Ustáriz manifiesta que a partir del caso de la niña que llegó en diciembre desde la Argentina existirían 10 adolescentes más que fueron llevadas a otros países en similares condiciones. Asimismo, existe la denuncia específica de una niña de Sacaba que estaría en Buenos Aires, posiblemente explotada sexualmente.

http://www.opinion.com.bo/PortalNota.html?CodNot=72100&CodSec=6

No hay comentarios: