7-diciembre-05
De acuerdo con un estudio del Inacipe, el estado se ha ido convirtiendo en destino de turismo sexual.
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Así lo advirtió el director de Investigación del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), Miguel Ontiveros Alonso, un día antes de presentar en ese estado el “Estudio jurídico-penal relativo a la explotación sexual comercial infantil en el estado de Guerrero”, realizado por esa institución y avalado por la Organización Internacional del Trabajo.
Guerrero (en particular el puerto de Acapulco y todos los destinos turísticos), junto con Jalisco, Baja California y el Distrito Federal son los cuatro estados en los que más se ha detectado la explotación sexual comercial infantil.
A nivel mundial, México se ha ido convirtiendo en destino de turismo sexual, debido a la laxitud de sus leyes, las que han permitido que pederastas sean impunes. Por ejemplo, el bien jurídico que se protege en el abuso sexual a menores es “la moral y las buenas costumbres”. En ese sentido, la OIT y el Inacipe han estado realizando varios estudios jurídicos de los estados.
Delitos contra la moral
Sobre esta carencia legislativa, Guerrero no es la excepción. “La pornografía, la prostitución, el lenocinio y la trata de personas (figuras relativas tanto a personas menores como mayores de edad) están contempladas en el Código Penal de Guerrero mediante la expresión genérica de: ’delitos contra la moral’”.
En otras palabras, se perseguirá una falta básicamente administrativa: si un hombre abusa de un menor de edad estará atentando contra la moral y las buenas costumbres.
Más aún, aunque Acapulco es un importante destino de turismo sexual, este delito no está contemplado en sus leyes; así que el extranjero o mexicano que viaje por el estado con el fin de sostener relaciones sexuales con menores de edad quedará impune.
Éste es un problema que se ha presentado en otras entidades del país. Incluso, las organizaciones sociales que han combatido este problema en la frontera mexicana con Estados Unidos han impulsado en ocasiones que se juzgue al criminal en EU, aunque el delito haya sido cometido en México, ya que de otro modo quedaría impune.
Otro importante vacío legal en Guerrero es que se castiga la producción y distribución de pornografía infantil; sin embargo, la posesión no, por lo que aquel que adquiera estos objetos no podrá ser procesado.
Además, para que se persiga la producción de pornografía infantil se debe comprobar que el delincuente persiga un fin lucrativo; es decir, aquel que lo haga por puro placer no será castigado con el peso de la ley.
El estudio sobre Guerrero, realizado por los investigadores Rubén Quintino Zepeda y Katherine Mendoza Bautista, señala también otras deficiencias.
“Singular crítica merece el artículo del Código Penal del estado de Guerrero toda vez que, en alguna de sus hipótesis típicas requiere como elemento del tipo subjetivo, el hecho de que el autor persiga con su comportamiento un especial ánimo de lucro”.
Sin embargo, critica el estudio, el Código Penal guerrerense “injustificadamente se refiere a la homosexualidad como un comportamiento específico que resulta procaz o prohibido”, lo que claramente atenta contra los derechos humanos.
Además, el delito de trata de personas tampoco está redactado de acuerdo con los estándares internacionales, señala el estudio. Únicamente contempla la trata de personas con fines de prostitución, a pesar de que este delito puede tener el objetivo de explotar a las personas de otras formas, como el trabajo forzado, la esclavitud y el tráfico de órganos.
Internet: espacio virtual de impunidad
La Secretaría de Seguridad Pública, a través de su división de Policía Cibernética, ha detectado 397 sitios web con pornografía infantil; 197 de ellos son mexicanos. Esta proliferación ha detonado la preocupación por parte organismos internacionales por la disponibilidad cada vez mayor de pornografía infantil en internet.
En ese sentido, países como España han reformado sus códigos penales para atacar esta problemática.
El estudio también señala que México debe modernizar la legislación al respecto. Se calcula que el negocio de la explotación sexual comercial infantil reporta ganancias de siete billones de dólares anuales a lo largo del mundo. La explotación sexual comercial infantil es un fenómeno difícil de estudiar. Las únicas cifras con que cuenta México son del año 2000. Se calcula que en México hay entre 16 y 20 mil niños explotados sexualmente. Pero esta cifra no incluye a niños abusados sexualmente en sus casa o por extraños. Se trata de los explotados con fines comerciales.
Lydiette Carrión • Ciudad de México
