27 mayo, 2008

Ley sobre los crímenes sobre derechos humanos

Redacción El Mercurio

Las acciones y penas por genocidio, lesa humanidad, crímenes de guerra o de Estado, tortura, desaparición forzosa de personas, delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes y personas indefensas, tráfico de órganos, secuestro y homicidio por razones políticas, peculado, cohecho, concusión, serán imprescriptibles y no serán susceptibles de indulto ni amnistía.


Las acciones y penas por genocidio, lesa humanidad, crímenes de guerra o de Estado, tortura, desaparición forzosa de personas, delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes y personas indefensas, tráfico de órganos, secuestro y homicidio por razones políticas, peculado, cohecho, concusión, serán imprescriptibles y no serán susceptibles de indulto ni amnistía.

Así lo dispone uno de los 19 numerales del único artículo del Derecho al Debido Proceso y una Justicia sin Dilaciones, que debatió ayer el Pleno de la Asamblea Constituyente.

La asambleísta manabita María Soledad Vela, de Acuerdo País, defendió la propuesta y abrió el debate, indicando que el debido proceso comprende los derechos humanos que deben ser protegidos en materia de controversia judicial y las reglas mínimas que deben seguir tanto las autoridades judiciales como las públicas, en torno a procesos administrativos o de la justicia común.

"El Estado garantiza en los procesos judiciales, el reconocimiento de la inocencia de un ser humano mientras no se compruebe su culpabilidad; la obtención de pruebas legalmente actuadas; un juicio justo y sin retardo; la obtención de ayuda jurídica profesional gratuita que impida la indefensión mediante la institucionalización de la defensoría pública para toda materia como la tercera parte del equilibrio que sostiene la justicia: juez, acusador y defensor; el cumplimiento de una sentencia no solamente punitiva sino resocializadora y las medidas alternativas que sustituyan la cárcel por trabajo comunitario que permita integrar al individuo a la sociedad", sostuvo Vela.

"El Estado también garantiza que los procesos administrativos, estén sujetos a normas claras y que las resoluciones de autoridad competente deben ser siempre justificadas", dijo.

Los jueces al dictar sentencia condenatoria en materia penal, tendrán la oportunidad de sustituir la privación de la libertad por sanciones alternativas por ejemplo el trabajo comunitario, esta sustitución se realizará tomando en cuenta el tipo de delito de que se trata, la personalidad del delincuente y la mejor forma de reincorporarlo a la sociedad.

Debido al uso indiscriminado y al abuso que en los últimos años se ejerció con la prisión preventiva, la nueva constitución promueve que la privación de la libertad sea aplicada en casos excepcionales y no como la norma general. Estos casos de excepción son únicamente cuando haya delito flagrante, cuando sea necesario garantizar la comparecencia del acusado o para asegurar el cumplimiento de la pena.

Se prohíbe la violación de los derechos humanos del detenido o investigado, por ello, ninguna persona puede ser incomunicada.

Las personas que por su condición económica no pueden pagar un abogado defensor, han tenido que sufrir condenas carcelarias sin siquiera tener la oportunidad de ejercer su defensa, la mayor parte de personas detenidas sin sentencia están hacinadas porque no cuentan con abogado, es deber del Estado proporcionarles un defensor público, las personas privadas de la libertad tiene derecho a acceder y comunicarse libre y privadamente con su defensor sea público o privado, en cualquier momento.

No considera justo que en delitos de lesa humanidad o execrables, prescriba la posibilidad de que él o la afectada, inicien acciones en contra de los perpetradores de estos delitos, o que el Estado pierda la posibilidad de perseguir estos delitos cuando han afectado a la colectividad, por ello propone que las acciones y penas por delitos de genocidio, lesa humanidad, crímenes de guerra o de Estado, tortura, desaparición forzada de personas, delitos sexuales contra niños, niñas, adolescentes y personas indefensas, tráfico de órganos, secuestro y homicidio por razones políticas, peculado, cohecho, concusión sean imprescriptibles.

En ninguno de estos casos se impondrán penas alternativas, como tampoco serán susceptibles de indulto ni amnistía.

Prevenir y sancionar trata de personas en DF México

Menores de edad y mujeres son las principales víctimas de este delito, conocido como la nueva forma de esclavitud


Claudia Bolaños
El Universal
Ciudad de México

Jueves 15 de mayo de 2008

Una iniciativa para crear la ley para prevenir y sancionar la trata de personas en el Distrito Federal fue presentada hoy, con el fin de erradicar esta situación que se observa a simple vista en varias calles de la ciudad de México.

Menores de edad y mujeres son las principales víctimas de este delito conocido como la nueva forma de esclavitud.

En conferencia de prensa, los diputados Daniel Ordoñez y Tomás Pliego, presidente y vicepresidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), así como del titular de la Comisión de Derechos Humanos local (CDHDF), Emilio Álvarez Icaza, mencionaron la necesidad de atender esta situación porque México es paso obligado para los emigrantes hacia los Estados Unidos.

Tomás Pliego explicó que se pretende sancionar con penalidades que van de los 6 a 12 años de prisión y de 500 a mil 500 pesos de multa a quien cometa este delito, que es usado no sólo para explotar sexualmente a, sobre todo, mujeres y niños, sino para evitar también la explotación laboral y el tráfico de órganos.

Álvarez Icaza dijo que cifras de la ONU indican que cada año entre 600 y 800 mil personas son víctimas de trata de personas, sobre todo emigrantes, y datos de la UNICEF mencionan que el número de niñas, niños, y adolescentes víctimas de explotación comercial en México sumó 16 mil hace dos años.

El problema es tal que se considera que es el tercer negocio ilícito que les deja más ganancias a los delincuentes que participan en éste, tan sólo después del narcotráfico y venta ilegal de armas.

Daniel Ordoñez abundó en que en la iniciativa de ley se prevé la creación de un comité interdisciplinario, encabezado por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, para investigar estos casos que están prácticamente a la vista de todos.

En la conferencia, informó que el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México es el principal punto de tráfico de personas, sobre todo de menores.

25 mayo, 2008

Mercado negro de cadáveres

por Luis Fernández hermana. - 25/05/2008

El 18 de marzo de 2008, Michael Mastromarino se declaró culpable ante un juez de EE. UU. de haber manipulado 1.800 cadáveres durante cinco años para extraer huesos, tejidos, piel, órganos, válvulas cardíacas y otras partes con destino al mercado negro. El negocio era redondo. Este cirujano dental compraba los cuerpos a las funerarias por 1.000 dólares cada uno. Una vez separadas las partes útiles, obtenía 13.000 euros por cadáver, que Mastromarino rellenaba después con tubos de plástico para que sus familiares no notaran nada.

Este caso es el último de una larga serie que ha llegado en los últimos años a los tribunales de EE. UU. y ha venido a confirmar el crecimiento vertiginoso del mercado negro de cadáveres, sin que las autoridades acierten a implementar ni siquiera medidas para su regulación, como ahora se pide desde diferentes sectores. A los hospitales han llegado partes de personas fallecidas por sida, hepatitis u otras enfermedades, sin que funcionaran los controles actualmente existentes tanto en EE. UU. como en muchos otros países. Al contrario, como vienen demostrando los expertos, la profesión de corredor de cuerpos se está constituyendo en una actividad en expansión aceitada por pingües beneficios.

DESDE EL SIGLO XIX


El tráfico ilegal de cadáveres desde luego no es nuevo. Hay historias al respecto sobre todo desde el siglo XIX, cuando los estudios de anatomía ganaron carta de ciudadanía. El salto cualitativo viene propiciado por un crecimiento espectacular de la demanda de partes del cuerpo humano, ya sea para investigación científica, farmacológica y docencia médica, como para trasplantes o para la denominada cirugía reparatoria, mientras que, por otra parte, la oferta dentro del marco legal ni siquiera se acerca someramente a dicha demanda En este nido ha crecido el comercio internacional de cadáveres, nutrido por redes de empresas e industrias, líneas de distribución y logística y, finalmente, numerosos puntos de venta, pese a que todos los países del mundo, excepto China e Irán, consideran ilegal el comercio de partes del cuerpo humano. Pero lo cierto es que nunca como hoy los vivos necesitan tanto a los muertos.

En EE. UU., cerca de un millón de personas al año se someten a cirugía para trasplantes de tejidos blandos, piel, huesos, tendones u órganos diversos, todo ello procedente de cadáveres. Cada año, 10.000 estadounidenses donan su cuerpo a la ciencia. Si se le suma las partes procedentes de las víctimas mortales de accidentes, el desnivel entre oferta y demanda es sideral. Según Donna Dickinson, experta en bioética y autora del reciente libro Body Shopping (Compra de Cuerpos),hay compañías que aseguran beneficios de 200.000 dólares por cuerpo una vez que sus partes entran en el mercado negro.

Este negocio se alimenta tanto de las necesidades perentorias de quienes requieren el trasplante de órganos para su supervivencia, como de la presión popular hacia una especie de aspiración a la inmortalidad o la promesa de la eterna juventud. En este caldo de cultivo, miles de familias y de profesionales no se preguntan por la procedencia de las partes del cuerpo humano que necesitan, aunque ahora cunde una sospecha generalizada: donde no llega el sistema legal, lo hace el mercado negro que promete resolver el problema aquí y ahora y no en una angustiosa lista de espera.

ÓRGANOS

En EE. UU. mueren al año más de 6.000 personas esperando un trasplante de riñón, pulmón o corazón. En Gran Bretaña, 400. Estos números proyectan la insoportable carga de estrés y desesperanza de quienes aguardan un órgano salvador en el hospital, a veces mantenidos con sistemas artificiales. En EE. UU. hay unas 100.000 personas en esa situación y apenas el 20% recibirán el trasplante esperado. No resulta fácil obtener este tipo de cifras en los países desarrollados, ya no digamos en las potencias emergentes. Pero constantemente afloran casos en Israel, Turquía, Centroeuropa o el Sudeste asiático, además de los escenarios bélicos, algunos tan macabros como la extracción de órganos en vida, con o sin el consentimiento del donante, por precios que después se multiplican por mil o diez mil en las transacciones finales.

Consultando Internet se puede ver la deriva en la opinión pública acerca del comercio ilegal de cadáveres. Hasta hace tan sólo unos cinco años, prevalecía el punto de vista de lo que podríamos denominar la era de la ética contra los ladrones de cadáveres que satisfacían demandas puntuales, sobre todo de la investigación médica. A medida que la salud y el aumento de la esperanza de vida se han convertido en los bienes más preciados de las sociedades avanzadas, los argumentos han comenzado a moverse hacia la comprensión de la situación por la que atraviesan los pacientes y sus familiares, el reconocimiento de la importancia del negocio de los transplantes -ya sea por estética o para salvar vidas-y la necesidad, en todo caso, de flexibilizar el marco legal para regular un mercado que va siempre envuelto en una complejidad ética y cultural que afecta nada menos que a la concepción social de la muerte y la manipulación no consentida de los cuerpos de seres queridos.

MERCADO ABIERTO

La propuesta que gana cada vez más adeptos es la compra y venta de órganos humanos en un mercado abierto. Cuando aparecen los matices, se desatan las inquietudes. Como la sugerencia de cambiar la donación de órganos (sin que desaparezca esta figura legal) por su venta por parte del donante en vida, o de sus familiares cuando fallezca. En este caso, aparte de la complejidad de las reglas del consentimiento, el estrés de la decisión se traslada al seno de las familias, quizá hasta límites insoportables en momentos de crisis económica. Algunos analistas proponen incluso que el órgano se pueda vender en vida y acordar que el dinero se pague a los descendientes, lo cual no deja de ser una forma legal de plantar la semilla de una enfermiza desconfianza en familias quizá muy sanas. El punto de vista opuesto considera que medidas como éstas consagraría la parte más execrable del actual mercado negro de cadáveres, donde los más pobres son los más vulnerables a las tropelías que se vienen denunciado en muchos países del mundo.

Incluso los proponentes de regularizar el mercado de cuerpos reconocen que negociar con la muerte no es una forma de vida muy segura. Se haga como se haga, no habría forma acabar con el suministro ilegal de partes del cuerpo humano propiciado por los desequilibrios sociales, las guerras y las asimilación de la ideología de la salud total, reparadora o prolongadora de la vida, por las emergentes y pujantes clases media de países como China o India, por citar tan sólo a dos países en pleno crecimiento económico donde se ha admitido públicamente la existencia de este mercado negro. Michele Goodwin, en su excelente libro Black Markets, concluye ante este escenario que el mercado negro de cuerpos humanos ha venido para quedarse. Y no será fácil convivir con él.

17 mayo, 2008

Sustracción masiva de órganos en China

Relatores Especiales de Naciones Unidas reiteran denuncias sobre sustracción masiva de órganos a practicantes de Falun Gong por el régimen chino

Capital Federal - Dos Relatores Especiales de Naciones Unidas reiteraron sus denuncias realizadas sobre la sustracción sistemática de órganos a practicantes de Falun Gong detenidos ilegalmente en China. Una vez más, le requirieron al régimen comunista chino una respuesta cabal a los alegatos sobre la extirpación forzada de órganos vitales a los prisioneros de dicho grupo perseguido, y una explicación por el abrupto incremento de las operaciones de trasplante llevadas a cabo en China desde el año 2000.

Asma Jahangir y Manfred Nowak, Relatores Especiales de Naciones Unidas para la Libertad de Religión o Creencia y para el Problema de la Tortura –respectivamente–, emitieron el cuestionamiento en forma conjunta y lo documentaron en sus respectivos informes anuales 2008 para el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, como un seguimiento de sus comunicaciones previas con el gobierno chino.

La comunicación original con el alegato de la sustracción de órganos había sido emitida el 11 de agosto de 2006 por los mismos relatores, junto con la Relatora de UN para el Tráfico de Personas, Sigma Huda. Partiendo de información presentada por individuos y grupos voluntarios –incluyendo el Grupo de Trabajo de Derechos Humanos de Falun Gong (FalunHR) – , los relatores especiales remarcaron e hicieron cuestionamientos al régimen chino sobre la inexistencia de fuentes identificables de los órganos, los tiempos de espera notoriamente cortos para encontrar órganos perfectamente compatibles y la correlación entre el abrupto incremento de los trasplantes de órganos y el comienzo de la persecución a los practicantes de Falun Gong.

Aunque el gobierno chino contestó el 28 de noviembre de 2006 con una negación categórica, no dio respuesta a los puntos críticos cuestionados por los relatores especiales. La comunicación siguiente de los relatores, emitida por Jahangir y Nowak el 25 de enero de 2007, sostenía su petición al régimen chino para que éste aclarara aquellos puntos.

En los informes anuales de 2008, Asma Jahangir y Manfred Nowak también reportaron una ‘acción urgente’ conjunta, realizada junto con el Grupo de Trabajo de Naciones Unidas sobre la Detención Arbitraria, por la detención del Sr. Cao Dong, testigo de la sustracción de órganos del régimen chino a los practicantes de Falun Gong. El 21 de mayo de 2006, Cao había sido entrevistado en Beijing por el Vicepresidente del Parlamento Europeo, Edward McMillan-Scott, y le había dado su testimonio. Luego de la reunión, las autoridades chinas arrestaron a Cao. Los informes indican que Cao fue sentenciado a cinco años de prisión por “aceptar entrevistas ilegales”.

Los Informes de Naciones Unidas sobre Falun Gong pueden encontrarse en http://www.falunhr.org/index.php?option=content&task=category&id=111&sectionid=8&Itemid=)

La Asociación Civil de Estudio de Falun Dafa en Argentina hace eco del llamamiento del Grupo de Trabajo de Derechos Humanos de Falun Gong (www.falunhr.org) a los gobiernos y medios de comunicación del mundo a “prestar atención a los hallazgos de los Relatores Especiales de Naciones Unidas sobre la sustracción masiva de órganos a practicantes de Falun Gong por parte del régimen comunista chino” y a “no desviar la mirada frente a este serio crimen contra la humanidad”.

Trasfondo

Falun Dafa es una disciplina de origen chino que incluye ejercicios suaves, meditación y enseñanzas que subrayan los principios de verdad, benevolencia y tolerancia. Al principio de su difusión masiva, fue aceptada por el régimen chino, pero cuando su popularidad creció vertiginosamente y el número de miembros superó al del Partido Comunista, por orden del entonces dictador Jiang Zemin comenzó una feróz persecución que ya lleva ocho años. Según organismos de derechos humanos, miles ya han muerto a raíz de esta persecución y cientos de miles han sido arrestados ilegalmente y torturados. Desde 2001, FalunHR ha remitido más de diez mil de tales casos documentados a Naciones Unidas, a los gobiernos del mundo y a las organizaciones internacionales de derechos humanos.

Investigaciones en los últimos años, que comenzaron con un informe elaborado por el ex Secretario de Estado de Canadá, David Kilgour, y el abogado canadiense –ganador del premio Tarnopolski de derechos humanos de la ICJ– David Matas (www.organharvestinvestigation.net), comprueban que incluso los detenidos, sistemáticamente, están siendo asesinados luego extraerles los órganos vitales con fines lucrativos.

Contacto de prensa en Argentina:

Silvia Gleizer 155-422-3366
Alvaro Colombres 156-821-4666

Contactos del FalunHR en EE.UU.:
Arleen Freeman, 1+619-280-5177 Shizhong Chen, 1+858-366-5818
contact@falunhr.org

05 mayo, 2008

HRW exige que se investigue...

HRW exige que se investigue el presunto traslado forzado de serbios a Albania

Human Rights Watch (HRW) pidió hoy a los Gobiernos de Albania y Kosovo que inicien una investigación independiente y transparente que esclarezca la suerte de cientos de desaparecidos serbios que presuntamente fueron trasladados a Albania tras la guerra de 1999.


La ex fiscal general del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), Carla Del Ponte, afirmó en su nuevo libro de memorias que el
Hrw exige que se investigue el presunto traslado
La organización, con sede en Nueva York, consideró en un comunicado que la aparición de nuevas informaciones refuerzan las acusaciones de que se produjeron traslados forzados de serbios de Kosovo a Albania durante el conflicto en esa zona balcánica.

La ex fiscal general del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), Carla Del Ponte, afirmó en su nuevo libro de memorias que el desaparecido Ejército de Liberación de Kosovo (UCK) permitió el tráfico de órganos humanos de ciudadanos civiles serbios.

En el libro titulado 'La caza', Del Ponte reveló que durante sus investigaciones tuvo información de que unos 300 serbios fueron secuestrados y asesinados durante el conflicto de Kosovo de 1999 por traficantes de órganos, presumiblemente albano-kosovares.

Las acusaciones de la ex fiscal fueron rechazadas tanto por las autoridades de Tirana, como por las de Pristina.

Human Rights Watch indicó que ni el primer ministro de Kosovo, Hashim Thaci, ni su homólogo albanés, Sali Berisha, han contestado a las cartas que le enviaron el mes pasado pidiendo una investigación de los hechos.

HRW aseguró que considera 'bien investigado y creíble los trabajos periodísticos que llegaron a la oficina de Del Ponte y que la ex fiscal citó en su libro.

Siete antiguos miembros de la guerrilla albano kosovar proporcionaron por separado a los periodistas detalles sobre su participación u observación del traslado de serbios secuestrados a Albania tras el conflicto, según el comunicado de HRW.

Esas informaciones agregaron que los más jóvenes y sanos nunca fueron golpeados, se les alimentaba y recibían visitas médicas, hasta que se les trasladaba a una casa cercana a Tirana en donde se les extraían órganos.

'La información sobre el tráfico de órganos da que pensar, pero está lejos de ser completa, aunque persiste el hecho de que cientos de personas, en su mayoría serbios, se les considera desaparecidos después de la guerra', valoró el investigador de HRW, Fred Abrahams, que es un especialista en las violaciones de los derechos humanos cometidas en esa parte de los Balcanes durante la década pasada.

HRW destacó que dos personas conocedoras de las indagaciones del TPIY y la misión de la ONU en Kosovo (UNMIK) sobre este asunto corroboraron la versión de Del Ponte de que se hallaron indicios de operaciones quirúrgicas en la casa denunciada en las investigaciones periodísticas.

Así mismo, un informe de UNMIK en poder de HRW detalló las pruebas forenses realizadas en esa casa en la que se hallaron rastros de sangre, jeringuillas, medicamentos y bolsas de suero.

Por ello, según HRW, los Gobierno de Kosovo y Albania deberían iniciar una investigación 'seria' para esclarecer lo ocurrido.


Terra Actualidad - EFE