10 marzo, 2008

Propuesta de parlamentario canadiense para frenar el tráfico de órganos

El proyecto de ley pretende sancionar a cualquier canadiense que participe en un trasplante de órganos que se considere ilegal en Canadá como un crimen muy serio, al nivel de asesinato


Por Matthew Little – La Gran Época
07.03.2008

CANADA - Borys Wrzesnewskyj, Miembro del Parlamento de Ontario, recientemente presentó un polémico proyecto para modificar la legislación vigente, con la intención de disuadir a los canadienses que necesitan cirugías de trasplante a no involucrarse con órganos que fueran comprados ilegalmente o robados.

Según el proyecto de ley C-500 sería ilegal para los canadienses conseguir un trasplante de órgano en el extranjero si el órgano fue comprado o tomado de una víctima contra su voluntad.

“Esta es la primera pieza en la legislación que específicamente pone de manifiesto el horror de la cosecha ilegal y el tráfico de órganos y partes del cuerpo humano”, dijo Wrzesneskyj en una entrevista con La Gran Época.

El parlamentario indicó que la falta de legislación y los crecientes informes alrededor del mundo acerca del tráfico o cosecha de órganos, lo empujó a impulsar el proyecto de ley.

Hace años Wrzesnewskyj fue conmocionado al oír de un orfanato en Ucrania en el que estaban sacrificando a niños para que sus órganos pudieran ser vendidos. Reportajes de granjeros, indios pobres y trabajadores vendiendo sus órganos por el precio de un taxi, reforzaron su impresión.

En 2004 diversos informes revelaron que en algunos pueblos de Pakistán, al menos la mitad de la gente ha vendido un riñón con la esperanza de escapar de la pobreza y algunos han quedado permanentemente incapacitados por complicaciones de salud.

Según Wrzesnewskyj, el empuje final para actuar llegó en la forma de un informe titulado “Cosecha Sangrienta” , llevado adelante por dos canadienses, David Kilgour, ex miembro del Parlamento de Canadá y David Matas, un renombrado abogado de derechos humanos.

El informe que presentó sus últimos hallazgos en 2007, detalla una serie de evidencias que contundentemente sugieren que el régimen comunista chino está matando a miles de practicantes de Falun Gong encarcelados ilegalmente y vendiendo sus órganos en lucrativos negocios de trasplantes. El informe encontró que los canadienses están entre los “clientes” del mundo desarrollado que viajan a China para trasplantarse.

“Se llegó a la comprensión de que nosotros tenemos que hacer algo acerca del comercio de órganos humanos -afirmó Wrzesnewskyj- y Canadá tiene que estar en primera fila. Canadá tiene una increíble reputación en apuntar a este tipo de cuestión”.

La legislación en si misma fue laboriosa de elaborar y redactar. Wrzesnewskyj dijo que empezó trabajando en ello el verano pasado con un plantel de abogados e investigadores de la Cámara de los Comunes. El proyecto de ley pasó por 12 borradores antes de ser introducido.

Según indicó, está seguro de que el gobierno puede caer antes de que el proyecto de ley C-500 llegue a ser ley pero dijo que si eso sucede esto puede ser re-introducido. Además Wrzesnewskyj espera inspirar a otros países a seguir su ejemplo.

“Es accesible ahora para los legisladores de cualquier país del mundo si están preocupados acerca de este asunto…Puede ser que algunos detalles no coincidan con la legislación en otros países, pero hay una plantilla que puede ser aplicada en la mayoría de nuestras democracias occidentales”.

El proyecto de ley C-500 tiene la intención de tratar el robo o el tráfico de órganos como un crimen muy serio, en un nivel de asesinato, dijo Wrzesnewskyj. Las sentencias mínimas son de cinco años y el máximo es la vida. La legislación requeriría que cada receptor de órganos pruebe que lo obtuvo éticamente de un donante por propia voluntad.

El proyecto de ley además prohibiría a gente de otros países entrar en Canadá si se sabe que participaron en el comercio ilícito de órganos. Eso incluiría hombres de mediana edad que compran órganos de granjeros empobrecidos o doctores en hospitales militares chinos que realizaron trasplantes de órganos tomados de practicantes Falun Gong asesinados.

Señaló además que los políticos de cualquier partido tienen motivos suficientes para apoyar el proyecto de ley, ya que esto no es un asunto partidista.

Wrzesnewskyj añadió que como un miembro del Parlamento, está entre los pocos que pueden realmente afectar la práctica del tráfico y sustracción de órganos. “Yo estoy compelido no solo personalmente, pero en nombre de la gente a la que represento, a hacer lo que pueda y a detener que ocurra este tipo de horror”.

El animó a la gente a apoyar el proyecto de ley C-500 y que expresen a sus funcionarios elegidos que quieren que esto se apruebe rápidamente.


No hay comentarios: